lunes, 6 de enero de 2014

El Quinto Piso a Nivel del Mar

Ayer fue mi cumpleaños número 50. Lo célebre o me lo celebraron en una hermosa playa, rodeado de familia y algunos pocos amigos.

Quedara el recuerdo de una tarde inolvidable con muchas tapas, mucha sangría, mucho flamneco y sobretodo, mucho sentimientos de agradecimiento con mi familia, con mis amigos, con la vida que son todos regalos recibidos de Dios.

Como reflexión de mi medio siglo, sólo me queda decir que soy un hombre con muchos defectos y con pocas virtudes, pero con estas me sobra para ser feliz.
Seguro he recibido mucho más de lo que necesito o merezco, pero lo que más valoró es el amor, así venga en  forma de familia, amistad, gratitud o servicio.

Gracias Dios Mío por tanto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario